La Eurocámara insiste en el derecho del pasajero a embarcar con maleta de mano sin sobrecoste
La comisión de Transportes y Turismo del Parlamento Europeo ha reclamado de nuevo este martes el derecho de los pasajeros aéreos a embarcar con una maleta de mano sin pagar un sobrecoste por ello, después de que los 27 pactaran este mes negociar que esta gratuidad se limite a equipajes que quepan bajo el asiento, como mochilas, bolsos o fundas de ordenador.
Este no es aún el mandato negociador que determinará la posición de la Eurocámara en las negociaciones con el Consejo (gobiernos) sobre las nuevas reglas para los pasajeros aéreos, sino un dictamen sobre la aplicación de los derechos de pasajeros en la Unión que podrá ser incorporado cuando se defina la posición de la Eurocámara, no antes de otoño.
La Comisión Europea presentó su primera propuesta de reforma en 2013 y la Eurocámara fijó su posición al respecto un año después, pero las diferencias entre los Veintisiete han mantenido el proceso en punto muerto durante una década. Tras una propuesta revisada de Bruselas en 2023 y el mandato consensuado por los 27 este mismo mes, los eurodiputados abordan ahora la revisión de las posiciones antes de abordar la negociación final de la reforma.
En todo caso, los eurodiputados reivindican el derecho del pasajero a embarcar sin pagar un recargo con un "artículo personal" con dimensiones máximas de 40x30x15 centímetros --en línea con la posición del Consejo-- pero también con un equipaje de mano pequeño, como también ha apoyado en varias sentencias el Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) pero que los 27 no reflejaron en su posición. En este caso, los eurodiputados plantean que ese equipaje de mano tenga como dimensiones máximas 100 centímetros y un peso de 7 kilogramos.
Otra de las reivindicaciones que queda recogida en el informe de la comisión de Transportes --que pasará por el pleno previsiblemente el próximo julio-- es garantizar que los menores de 12 años viajan sentados junto a su acompañante sin necesidad de pagar suplementos para reservar asientos y que los pasajeros con movilidad o visión reducida puedan viajar con un acompañante con billete gratuito.
El informe de la comisión de Transportes ha salido adelante con una vasta mayoría de 38 votos a favor, 2 en contra y 2 abstenciones; en una sesión en la que los eurodiputados dan también su visto bueno a iniciar las negociaciones con el Consejo para la reformas de las reglas sobre viajes multimodales y sobre la aplicación de los derechos de los pasajeros.
En este contexto, el eurodiputado de Compromís, Vicent Marzà, ha celebrado en un comunicado que "por fin" se consiga "avanzar en derechos concretos para los pasajeros, gracias a un trabajo de fondo y a la voluntad política de este Parlamento". "Dignificamos el Parlamento demostrando que no estamos aquí para plegarnos ante Ryanair, sino para garantizar más justicia, más transparencia y más protección para la ciudadanía", ha remachado.
También el Partido Popular ha aplaudido la adopción del informe, porque defiende el derecho de los viajeros a embarcar con un bolso y equipaje de mano "sin coste adicional, siempre que cumpla con los requisitos de seguridad aplicables". "La industria debe colaborar en la armonización de estas medidas", ha defendido, al respecto, la 'número 2' del PP en la Euromácamara, Dolors Montserrat.
PAPEL DE INTERMEDIARIOS Y OTROS CAMBIOS
El informe europarlamentario pide, además, aclarar el papel de los intermediarios que, como minoristas o proveedores, pueden vender billetes para que también sean responsables cuando se trate de reembolsar a los pasajeros aéreos en caso de cancelación de su vuelo, retrasos prolongados o se les deniegue el embarque.
Los eurodiputados quieren que estas empresas informen a los pasajeros en el momento de la reserva sobre el coste total de un billete de avión, las tasas de intermediación o servicio y sobre el proceso de reembolso, que no debería durar más de 14 días. En caso de que un intermediario no respete este plazo, corresponderá a la compañía aérea tramitar el reembolso en un plazo de siete días, según defiende la comisión europarlamentaria.
Asimismo respaldan la idea de un formulario único para las peticiones de indemnización y de reembolso y que sean las compañías aéreas las responsables de remitir dicho formulario a los pasajeros afectados, sin esperar a que ellos lo reclamen, o establecer canales de comunicación automáticos equivalentes en un plazo máximo de 48 horas tras la incidencia.
Respecto a las causas "excepcionales" que las aerolíneas pueden evocar para evitar la indemnización, los eurodiputados mantienen la demanda de 2014 de que se defina una lista clara con razones que lo justifiquen, tales como catástrofes naturales, una guerra, condiciones meteorológicas o conflictos sociales imprevistos, lo que no incluye las huelgas de personal de las compañías aéreas.
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