Los españoles gastaron de media más de 900 euros en moda en 2024, según GfK
Los consumidores españoles destinaron 921 euros de media por persona en la compra de calzado y ropa en 2024, por encima del gasto medio en Europa, que se situó en los 772 euros per cápita, según un estudio sobre el poder adquisitivo destinado al comercio minorista de moda elaborado por la consultora de investigación de mercados GfK - A NielsenIQ Company.
De los 25 países europeos analizados, Luxemburgo supera en más del 130% la media de la región. Suiza y Noruega ocupan el segundo y tercer lugar, respectivamente.
En el caso español, los habitantes de Madrid cuentan con un poder adquisitivo superior a la media para ropa y calzado, con 1.140 euros, pero los principales centros del gasto en moda están en Guipuzkoa (1.247 euros) y Bizkaia (1.182 euros).
El senior business manager en España de GfK, Gabriel Gómez, asegura que Luxemburgo ocuparía en realidad el tercer lugar de los países que más gastan en moda, con un 14,3%, si se analiza la proporción del poder adquisitivo destinado a ropa y calzado frente al gasto total en retail. "Proporcionalmente, España lideraría el ranking con un 14,8%, seguida del Reino Unido con un 14,4", apunta.
DE LUXEMBURGO A RUMANÍA
Catorce de los 25 países analizados cuentan con un poder de compra por persona superior a la media, frente a los 11 cuya capacidad de gasto es inferior. De ellos, Rumanía ocupa el último puesto con 375 euros, algo menos del 49% de la media en Europa.
Este país es un ejemplo de las diferencias existentes de gasto dentro de sus fronteras. Así, los habitantes de Bucarest desembolsan casi tres veces más en moda que los residentes del condado de Giurgiu, que limita al sur con Bulgaria.
En el informe también se destaca el caso contrario, como en Italia, donde los habitantes de Roma gastan cantidades superiores a la media en ropa y calzado, pero los milaneses gastan más de un 30% por encima de la media italiana en estas categorías.
Sin embargo, no siempre ocurre de esta manera. Por ejemplo, los berlineses gastan menos que la media alemana en ropa y calzado. En contraste, el mayor poder adquisitivo para estos productos se encuentra en Múnich y Hamburgo.
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