​Benjamin Netanyahu, formalmente acusado de delitos de corrupción

El Primer Ministro en funciones de Israel, Benjamin Netanyahu, será juzgado por soborno, fraude y delitos de abuso de confianza relacionados con tres casos de corrupción diferentes, informa 'Haaretz'. Es la primera vez en la historia del país, recuerda el periódico, que un primer ministro en ejercicio es acusado de delitos relacionados con la corrupción.

La decisión fue tomada por el fiscal Avichal Mandelblit, tras una audiencia de cuatro días con el equipo jurídico de Netanyahu, que presentó su defensa.

"La decisión se tomó después de una evaluación exhaustiva de las numerosas acusaciones formuladas por los abogados del Primer Ministro durante los cuatro días de la audiencia en octubre de 2019", dijo la oficina del Fiscal General en una declaración citada por el 'Times of Israel'. A pesar de ello, el fiscal está convencido de que las objeciones planteadas por los abogados de Netanyahu no son suficientes para evitar su acusación: "En sus acciones, supuestamente abusó de su posición y posición y dañó gravemente los bienes de la administración pública, la integridad de los funcionarios y la confianza pública en los funcionarios públicos", dijo Mandelblit en su decisión, refiriéndose a Netanyahu.

Los tres casos que ahora conducen a estas acusaciones, conocidos como casos 4.000, 2.000 y 1.000, son los siguientes:

-Acusación de fraude y abuso de confianza, por haber recibido cigarros puros, joyas y champán rosa supuestamente a cambio de una exención fiscal, para los emigrantes israelíes que regresan al país, con el objetivo de beneficiar a un productor de Hollywood y a un millonario australiano.

-Otro por fraude y abuso de confianza por un delito sólo en la forma de intento: Netanyahu supuestamente discutió con el editor del periódico Yediot Ahronot la posibilidad de limitar la circulación de otra publicación (Israel Hayom), altamente favorable al Primer Ministro, a cambio de una cobertura más favorable de Ahronot durante una campaña electoral.

-Finalmente, la última acusación incluye, además de los delitos mencionados, un delito de soborno y es el más grave de los tres escándalos: que Netanyahu, mientras fue primer ministro y acumuló el cargo de ministro de comunicaciones (2014-2017), habrá tomado decisiones dirigidas a favorecer al empresario mediático Shaul Elovitch, a cambio de una cobertura más favorable en Walla, uno de los sitios más populares de Israel que pertenece a la empresa Elovitch.

La acusación de la Oficina del Fiscal General está ahora oficialmente confirmada y el momento es particularmente relevante, ya que ningún gobierno israelí ha tomado posesión de su cargo desde las últimas elecciones y Netanyahu está actualmente en el cargo mientras que su oponente Benny Gantz está tratando de formar una coalición.

El partido del Primer Ministro, Likud, ya ha convocado una manifestación a favor de la puerta de Netanyahu, como una declaración de apoyo. El Primer Ministro, que siempre ha rechazado las sospechas y habla de una "caza de brujas", se espera que haga una declaración a los periodistas más tarde este jueves.