El ex presidente de Renault-Nissan niega que su familia le haya ayudado a escapar de Japón
El ex presidente ejecutivo de Renault-Nissan Carlos Ghosn dijo el jueves que organizó "solo" su fuga de Japón, donde está acusado de malversación financiera, al Líbano, negando cualquier implicación de su familia.
El ex presidente ejecutivo de Renault-Nissan Carlos Ghosn dijo el jueves que organizó "solo" su fuga de Japón, donde está acusado de malversación financiera, al Líbano, negando cualquier implicación de su familia.
"Las acusaciones hechas en los medios de comunicación de que mi esposa, Carole, y otros miembros de mi familia desempeñaron un papel importante en mi salida de Japón son falsas", dijo en un comunicado enviado a la agencia de noticias francesa AFP.
"Fui yo quien organizó mi salida [de Japón]. Mi familia no tuvo nada que ver" en esta decisión, añadió.
Carlos Ghosn, empresario franco-brasileño de origen libanés, estaba bajo arresto domiciliario en Japón en espera de ser juzgado, entre otros delitos, por evasión de impuestos, pero llegó al Líbano el domingo, información confirmada por los servicios de seguridad libaneses.
La fiscalía japonesa realizó este jueves una redada en la casa del ex presidente de Nissan, con el trasfondo -según la televisión pública NHK- de la supuesta violación de las leyes de migración por parte de Carlos Ghosn, que logró salir del país de forma ilegal sin pasar por los procedimientos legales previstos.
Según el periódico libanés al-Joumhouriya, Carlos Ghosn habría llegado a Beirut en un avión privado procedente de Turquía.
Carlos Ghosn, ex presidente del grupo Nissan y de la alianza Renault-Nissan-Mitsubishi, fue arrestado en Tokio el 19 de noviembre de 2018 por sospecha de abuso de confianza y evasión de impuestos.
El empresario, que estuvo detenido durante varios meses en Japón, fue posteriormente puesto en libertad en marzo de 2019 tras pagar una fianza, pero finalmente fue detenido de nuevo a principios de abril y puesto de nuevo en libertad bajo fianza y sujeto a condiciones restringidas (arresto domiciliario).
Los abogados y la familia de Carlos Ghosn, de 65 años, han criticado fuertemente las condiciones de detención del empresario, así como la forma en que la justicia japonesa ha gestionado el proceso de este caso.
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