La Comisión Europea prohibirá la venta o alquiler de viviendas de baja calificación energética

Viviendas /@EP

La Comisión Europea quiere reforzar su normativa por lo que a sostenibilidad se refiere. Así, está trabajando en nuevas medidas que quiere aplicar a partir de 2022, aunque algunas de ellas, como las que mencionaremos a continuación tardarán años en entrar en vigor.

Entre las nuevas normas, se incluye la de exponer al carburante de los vehículos por carretera al mercado de emisiones de CO2, aunque esto quiere aplicarse de cara al año 2026. Así pues, en caso de que esto suceda los carburantes sufrirán un incremento de precio.

Por otro lado, desde Bruselas pretenden prohibir tanto el alquiler como la venta de viviendas que tengan baja calificación energética. Con ello, tienen el objetivo de que los dueños reformen sus viviendas para convertirlas en unas más eficientes y sostenibles. 

En este caso, la nueva norma sobre viviendas se aplicaría de aquí a ocho años, por lo que los propietarios contarían con un margen amplio para realizar los cambios en sus casas. De cara a 2030, todos los edificios residenciles tendrán que tener una calificación energética F como mínimo. De no ser así, no podrán ni venderse ni alquilarse.

Por lo que hace a los edificios públicos, pues hasta ahora hablábamos de privados, estos tendrán que tener la calificación energética F antes de 2027; para 2030 tendrán que contar con la califiación E. Sin embargo, no tendrán que hacer reformas los edificios religiosos o históricos, pues estos quedan excluidos de la norma.

Por lo que hace a los certificados, cabe señalar que el rango más bajo es la letra G, que supone un consumo del 125% más que la media. La F está entre el 110 y el 125% y la E entre el 100 y el 110%. Así, el rango más eficiente es el A++, que consume un 30% menos que la media.