Una mujer se confina en el baño de un avión después de dar positivo en Covid-19 mientras volaba

Recurso de un avión comercial @ep

Una maestra que volaba de Nueva Jersey a Islandia compartió un video de ella misma en cuarentena durante horas en el baño del avión después de descubrir que dio positivo en Covid-19 en el medio del viaje.

Marisa Fotieo, profesora de educación infantil en Chicago, asegura que le empezó a doler la garganta aproximadamente una hora después de embarcar en el vuelo de Icelandair que tenía escala en Reykjavik.

La nativa de West Michigan asegura que había traído algunos kits de prueba rápida Covid-19 para el vuelo del 20 de diciembre y fue al baño para usar uno. "Y en unos dos segundos, la prueba dio positivo", lamenta Fotieo, según 13 On Your Side . "Me asusté, salí corriendo del baño y encontré a la primera persona que pude ver. Afortunadamente, fue este increíble asistente de vuelo llamado Rocky", relata.

El asistente de vuelo, Ragnhildur 'Rocky' Eiríksdóttir, le dijo que esperara en el baño y la ayudó a mantener la calma. "Pude escuchar algo por el intercomunicador que decía algo sobre un pasajero a bordo que dio positivo, y que es muy importante que todos mantengan sus máscaras puestas tanto como sea posible", asegura Fotieo. 

La azafata luego le dijo a Fotieo que el vuelo estaba lleno y que no tenía un asiento donde pudiera distanciarse de los demás pasajeros. "Había como 150 personas a bordo, así que dije que me quedaría en el baño el resto del vuelo", explica Fotieo.

Fotieo pasó parte del tiempo filmando un video que compartió en TikTok, que ha acumulado más de tres millones de visitas. "No puedo creer que pasé cuatro horas en ese baño", exclama en el video. Sin embargo, señala que "tienes que hacer lo que tienes que hacer".

Agregó que la asistente de vuelo fue "muy dulce" y le trajo bocadillos y agua y "me dijo que ese sería mi pequeño espacio".  El padre y el hermano de Fotieo estaban en el mismo vuelo y dieron negativo al llegar. Luego continuaron su viaje a Suiza. Fotieo, sin embargo, permaneció en Reykjavik durante una cuarentena de 10 días. Se hospedó en el Hotel Humanitario de la Cruz Roja.