Dr. Faustino Núñez: "Los jóvenes están adelantando sus problemas auditivos 20 años por la exposición al ruido"

La mitad de adolescentes y jóvenes españoles pueden sufrir problemas de audición por exponerse al ruido /@Pixabay

Este miércoles 27 de abril se celebra el Día Internacional de Concienciación sobre el Ruido, fundado por el Centro para la Audición y Comunicación en el año 1996 con la finalidad de alertar y crear conciencia en la población sobre los riesgos que tiene el ruido para el trastorno auditivo y también el impacto que puede tener en la salud.

Tanto es así que desde la Sociedad Española de Otirronolaringología y Cirugía de Cabeza y Cuello (SEORL-CCC) han alertado de que la mitad de los adolescentes y de las personas jóvenes de España podrían sufrir pérdida de audición o tinnitus (sentir un pitido en el oído) a causa de la exposición al ruido. 

Una pérdida de audición que, según explica a Catalunyapress el doctor Faustino Núñez, presidente de la Comisión de Audiología, es irreversible. "Cuando la exposición al ruido deteriora las células ciliadas del oído interno, el daño sufrido es permanente y las células ciliadas no se pueden recuperar", ha dicho.

¿CUÁLES SON LOS PRINCIPALES FACTORES DE RIESGO?

Con esta información, es relevante conocer cómo se daña el oído y como se puede evitar. Así, el doctor Núñez ha relatado a este medio que "el hábito de escuchar música con auriculares, junto con la asistencia a conciertos y locales de ocio con música alta, constituye en la actualidad la principal causa de trastornos provocados por el ruido en los jóvenes. Desde la SEORL queremos concienciar sobre la importancia de prestar atención a los ruidos más dañinos para reducir la intensidad y tiempo de exposición a los mismos y prevenir así, no solo problemas auditivos, sino de salud en general", explica 

En esta línea, desde la Organización Mundial de la Salud (OMS) calculan que alrededor de la mitad de los ciudadanos de entre 12 y 32 años hace uso de dispositivos electrónicos, tales como teléfonos móviles o MP3, a niveles inseguros. Esto ocurre, estiman, en países en que los ingresos de las personas van de medios a altos. 

Por esta razón, desde la Sociedad Española de Otirronolaringología y Cirugía de Cabeza y Cuello han querido explicar lo importante que es prestar atención a los ruidos que pueden resultar dañinos con el objetivo de reducir tanto la intensidad de los mismos como el tiempo de exposición a ellos.

Así, el doctor Núñez explica a este medio que "en el caso de los reproductores de música, lo ideal sería aplicar la regla del 60-60, es decir, no utilizarlos más de 60 minutos al día y no superar el 60% del volumen que permiten los mismos".

Además, agrega que "hasta hace unos años, los ruidos dañinos más habituales eran los procedentes de la exposición continuada en el entorno laboral durante ocho horas diarias a niveles que podían superar los 80 dB y, por ello, se aprobó una ley para que los trabajadores usaran las protecciones adecuadas en estas condiciones".

"Ahora vemos manifestarse los problemas típicos de personas de 60 años a los 40"

Con esto, comenta el doctor que "para garantizar una buena salud se recomienda no superar los 65 dB. Una exposición a un sonido superior a 85 dB supone un riesgo de pérdida auditiva si se repite en el tiempo. Se admite que una exposición a 80 dB durante más de 8 horas al día, en el entorno laboral, requiere uso de protección auditiva para no ser lesiva. Por encima de 100 dB existe un riesgo de pérdida inmediata. Si nos exponemos a 100 dB de escucha, no deberíamos hacerlo más de un cuarto de hora al día para evitar el daño, y si lo hacemos a 110 dB, no deberíamos hacerlo más de 1 minuto. Por último, el ruido llega al umbral del dolor cuando se sobrepasan los 125 dB y puede ser insoportable a los 140 dB", dice.

Además, comenta que "se estima que los jóvenes pueden estar adelantando la aparición de problemas auditivos 20 años, debido sobre todo a la exposición al ruido con auriculares. Cuanto mayor es el ruido, menos tiempo tarda en causar un daño auditivo permanente. Ahora vemos manifestarse los trastornos típicos de personas de 60 años ya a los 40. Alrededor de 200 millones de personas padecen infecciones crónicas del oído que son prevenibles o tratables", concluye.