El Barça a un paso de la final

El Barça ayer no se anduvo con tonterias. Aprovechó el momento irregular de los colchoneros, y apretó hasta que los atléticos reaccionaron. El resultado de 1-2 no supone solo una victoria, sino dos goles fuera de casa que dan tranquilidad a los de Luis Enrique de cara al partido de vuelta en estas semifinales de Copa del Rey.

Luís Suárez es un delantero valorado por muchas cosas, pero no su técnica con el balón en los pies. Sin embargo, en el minuto 5, recogió un rebote y se marcó 40 metros de carrera, autopase incluido, y anotó un tanto con una definición parecida a las que hacía Romario. El uruguayo no la pegó de exterior, sino de puntera, pero el gesto fue el mismo. Más tarde, y después de media hora de dominio azulgrana en el medio del campo, Messi le pegó seco y fuerte desde el vértice izquierdo del área y la clavó a media altura.

Las tornas cambiaron a la vez que cambiaron los intereses de ambos equipos. Tras firmar una gran primera parte, junto con la reacción a la desesperada del Atlético de Madrid, el Barça cedió terreno y los rojiblancos terminaron marcando, con gol de Griezmann en una jugada donde podría haber polémica con un presunto agarrón a Luís Suárez. El Atleti siguió intentándolo y hubiera empatado si no lo llega a evitar Cillessen.

Son, sin duda, grandes noticias para los de Luís Enrique. Era necesaria una victoria importante como la de anoche, después del juego irregular de los últimos partidos, así como las discutidas rotaciones.