​Los 28 crean el lunes el primer cuartel general militar de la Unión Europea

Los Veintiocho darán luz verde el lunes al establecimiento de una especie de embrión de un Cuartel General de la Unión Europea para planificar y conducir operaciones militares, que por ahora se limitará a dirigir las tres operaciones militares no ejecutivas de entrenamiento en marcha de las fuerzas militares de Malí, Somalia y República Centroafricana.

Los ministros de Exteriores y de Defensa de la Unión Europea discutirán el lunes los progresos para avanzar en el refuerzo de la cooperación en defensa acordada a finales del año, algo más urgente todavía tras la llegada de Donald Trump a la Casa Blanca después de que cuestionara el compromiso de Estados Unidos con la defensa de los europeos que no gastan suficiente en la materia. También se ha visto facilitado por el Brexit, dado que Reino Unido ha venido frenando desde años cualquier avance en este terreno en la UE.

El paso "más concreto" que darán los Veintiocho el lunes será aprobar el establecimiento de la llamada Capacidad Operativa de Planificación y Conducción para operaciones militares no ejecutivas, es decir, que no utilizan la fuerza, aunque Francia, España, Alemania e Italia, que apuestan por avanzar en la integración en defensa, esperan que en una etapa posterior también se encargue de las operaciones militares ejecutivas.

Los ministros de Defensa repasarán las operaciones de la UE en marcha en un desayuno previo con la Alta Representante de Política Exterior y de Seguridad Común de la UE, Federica Mogherini.

"Este tipo de Estado Mayor se encargará de conducir las operaciones no ejecutivas, tenemos tres por ahora", han explicado fuentes diplomáticas, que han avanzado que la nueva estructura se establecerá en el Estado Mayor de la UE bajo mando del actual director general del mismo, teniente general finlandés Esa Pulkkinen, y contará con "una quincena" de efectivos, aunque se podrá reforzar si hay necesidad.

El 'embrión' de cuartel general permanente estará operativo "en primavera" y permitirá al comandante de una operación sobre el terreno contar con "una estructura fuera del teatro de operaciones para dar apoyo a la misión si ocurre algo imprevisto", ha explicado una fuente de alto nivel de la UE, que ha explicado que la nueva estructura podrá asumir en el futuro no sólo el mando de operaciones de entrenamiento, sino también de supervisión, desmovilización y desarme, ha agregado la fuente.

Los Estados miembros revisarán su funcionamiento "a finales de 2018" de cara a decidir si se va "más lejos" para convertirlo en un verdadero cuartel general, que asuma el peso de las operaciones militares más exigentes "cuando se hayan ido los amigos británicos", han explicado diplomáticas. Londres ha vetado desde hace años la creación de un cuartel militar permanente de la UE para no duplicar las estructuras de la OTAN.

COOPERACIÓN ESTRUCTURADA PERMANENTE

Los Veintiocho discutirán también otras de las áreas en defensa en las que se quiere avanzar, incluido para poner en marcha la cooperación estructurada permanente (PESCO) que permitiría a un grupo de países avanzar por su cuenta en una mayor integración si lo aprueba una mayoría cualificada de países, promover una revisión anual coordinada del gasto en defensa de los Estados miembro e inversiones en capacidades a fin de poder identificar las capacidades deficitarias y para avanzar en la cooperación entre la UE y la OTAN.

Respecto a la PESCO, --prevista en el Tratado de Lisboa pero que nunca se ha utilizado ni se ha desarrollado--, los Veintiocho todavía no están de acuerdo en cómo se concretará ni el alcance que tendrá. "No estamos de acuerdo por ahora en lo que será exactamente", han admitido fuentes diplomáticas, preguntadas si hay una mayoría cualificada de países necesaria para lanzarla.

Francia, que siempre ha sido el primer país en abanderar la defensa europea, ya ha dejado claro que el objetivo de la PESCO debe ser "misiones de alta intensidad" sobre el terreno e incluir "criterios suficientes y obligaciones" para "poner intervenir sobre el terreno" y no limitarse a cosas como un mando médico para operaciones o prestar apoyo logístico, aunque fuentes diplomáticas admiten que "las cosas son sensibles" para varios países, incluido Alemania, por el riesgo de bajas que implican las operaciones militares de alta intensidad.

España está "más cerca de Francia" y defiende una PESCO con "potencia". "Queremos una PESCO ambiciosa y que aporte un valor añadido", han explicado fuentes diplomáticas, que admiten que "las cosas se están haciendo con cuidado". "Estamos tocando el núcleo duro de la soberanía nacional. Es complicado", han precisado.