Jéssica Albiach se la juega al PSC

Mientras que el gobierno de Pedro Sánchez ya tiene garantizado la aprobación de los presupuestos tras los pactos que ya son conocidos, en Catalunya, el ejecutivo de Pere Aragonès lo tiene más complicado al no conseguir los apoyos parlamentarios que necesitan tras la ruptura con sus ya ex socios de gobierno, Junts. Aún no hay votos suficientes para presentarlos en el Parlamento catalán.

Junts hasta la fecha rechaza dar su apoyo a las cuentas del 2023. Pese haber sido el entonces conseller, Jaume Giró, el responsable de su elaboración- consensuados con ERC-, ahora afirma que no son los suyos. Las negociaciones con el PSC, al menos de cara a la galería, parece que no van por buen camino, no obstante, nunca se puede decir un ‘no’ rotundo. En muchas ocasiones lo que parece imposible al final se ha transformado en posible.

Los únicos que de momento han dicho sí tras negociaciones con el equipo de Pere Aragonés son los Comunes, que se veía venir que al final sería así. Ese “triunfo” de Jéssica Albiach lo ha vendido de maravilla a sus compañeros de formación. Hasta cree que también a sus votantes. Son tiempos de elecciones y todo vale.

La estrategia, equivocada, de cualquier político suele ser no defender con argumentos sus posiciones, sino atacar al contrario, que queda mejor y lleva menos trabajo. Eso es lo que ha hecho la líder “parlamentaria” del partido de Colau cuando, tras el acuerdo, - con foto incluida-, con el presidente catalán, aprovechando el Consejo Nacional de Catalunya de su partido celebrado el pasado sábado, con auditorio rendido, daba “cuenta” superficialmente del acuerdo presupuestario alcanzado. La portavoz Albiach lo definía en estos términos: "Es un acuerdo en el que pierde Endesa, en el que pierde Foment y en el que pierde Blackstone". ¿Qué es Blackstone? Pues un fondo de capital riesgo estadounidense especializado en operaciones inmobiliarias. Por si no fuera suficiente, para justificar su apoyo, ha incidido “que son los presupuestos que van en la línea de las necesidades que tiene un país”. Y se ha quedado mirando al auditorio que aplaudía las afirmaciones de Albiach, que estaba encantada de conocerse. ¿Se ha vuelto a la vieja teoría de que los empresarios son los enemigos de los trabajadores? Pues parece ser que así es, al menos por parte del partido que “lidera” la alcaldesa de Barcelona. Los empresarios, como otros sectores, tienen buena y mala gente, son generadores de empleo y de riqueza para el país, no son los enemigos a batir. Poner etiquetas a los demás no es la mejor manera de generar buen clima. En esta situación de confrontación que se ha generado todos salen perdiendo, seguro. ¿Es patronal CCOO? Porque si no es así, cómo es posible que, como otros sindicatos llamados de clase, estén despidiendo a trabajadores, sin indemnización, porque no pueden subir salarios? Así está siendo.
 

Los votos de los Comunes no son suficientes para la aprobación de los Presupuestos en el Parlamento, es necesario que bien Junts o el PSC se avengan a votarlos. En esa situación, para desacreditar a los socialistas, este domingo, en el diario del Grande de España, declaraba que ve al PSC “más cerca de Foment que del Gobierno de coalición de Pedro Sánchez”. Unas declaraciones que evidentemente no han sentado nada bien a los afectados. Se trata de descalificar para sacar rédito electoral: ellos son responsables y apoyan los presupuestos, mientras que los otros son los malos. Es una vieja historia conocida, cuya argucia no ha cambiado con el tiempo. Decía uno de los más grandes directores de todos los tiempos, Wilder Billy, que “algunas personas sólo guiñan los ojos para poder apuntar mejor”.