La charlotada legal en que se ha convertido el juramento de sus Señorías tanto en el Congreso como en el Senado con apostillas al jura o prometo de cada uno de las diputadas/os y senadores/ as, ha llamado la atención también de los más jóvenes de la casa.
Los dos últimos presidentes del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero y Mariano Rajoy, han defendido este jueves la vigencia de la Constitución española y han coincidido en destacar que la unidad de España "no ha estado ni estará en peligro".
El texto, pactado por Bildu y PNV critica que la Carta Magna "impone" la unidad de España y pide incluir el derecho a decidir.
La portavoz del Gobierno, Isabel Celaa, ha alertado de que "el cierre efectivo del Parlament es una malísima noticia para todos los demócratas".
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, anuncia que el Gobierno va a proponer al Parlamento una reforma de la Constitución para acabar con los aforamientos en solo 60 días.
Los 'populares' someterán a votación elPacto por la Unidad de España y la Defensa de la Constitución en el que será el segundo Pleno del Congreso desde la llegada al Gobierno del Pedro Sánchez al que acusan de ocultar los acuerdos con los independentistas catalanes y vascos.
La posible constitución del govern catalán, liderado por Carles Puigdemont, huido a Bruselas, debe ser considerada como consecuencia de la supervivencia de la ideología y de la aplicación de las matemáticas parlamentarias.
Una multitudinaria concentración celebrada en la Plaza de Colón, en Madrid, ha clamado en favor de la defensa de la Constitución tras el referéndum del 1-O en Catalunya.
Los fiscales insisten en que se trata de una "flagrante y reiterada" vulneración de la legalidad y afirman que la situación en Cataluña es un "problema político" que debe ser solucionado a través de la política y los cauces que correspondan.
El presidente Rajoy ha señalado que responderá al desafío independentista catalán haciendo cumplir la ley "con toda la legitimidad y con toda la fuerza de la ley, sin levantar la voz y sin entrar en ningún enfrentamiento estéril, que es lo que pretenden los extremistas y radicales".