Park sostiene que es víctima de una "venganza política" y se niega a asistir a las sesiones judiciales.
Este escándalo de corrupción también acabó con el cese de la presidenta de Corea del Sur, Park Geun Hye, desatando una crisis política, que forzó la celebración de unas elecciones anticipadas.
El tribunal entiende que Park "violó la ley" al permitir que su confidente y amiga, Choi Soon-sil tuviera cierta influencia e interviniera en asuntos estatales,