Cospedal firma la resolución que concluye que pudo evitarse, pero no se pagarán nuevas indemnizaciones, como reclamaban algunos familiares.
El Consejo de Estado ha reconocido ofialmente la culpa de Defensa, dirigida entonces por Federico Trillo, en el accidente que acabó con la vida de 62 militares que regresaban de Afganistán.