El exalcalde aseguró que quiere que antes quiere ver "en qué situación queda" el consistorio
Xavier Trías, una persona que siempre había mostrado un perfil conciliador, dialogante, sin estridencias en sus discursos y moderado, hace tiempo que ha sufrido una transformación ideológica que preocupa a los que le conocen.
Reacciones diferentes entre los perdedores de este sábado.
Trías afirmó por activa y pasiva que no pactaría con Colau por su mala gestión - se hablaba de un pacto con los socialistas-. Eso lo está cumpliendo y el acuerdo con ERC está hecho. Maragall tiene sentenciado al PSC por unas cuantas razones, personales y políticas.
El ex alcalde de Barcelona ha sido señalado en una información que asegura que su nombre y el de su familia aparecen en un fideicomiso con el que podrían haber controlado activos en Suiza.
La declaración, prevista para este viernes, se adelantó al pasado 13 de junio y Pino únicamente respondió a las preguntas de su abogado.
El Supremo entiende que en la querella presentada por la antigua Convergència no existen indicios de delito y que las grabaciones, al obtenerse de manera ilegal, pudieron ser manipuladas.
La alcaldesa Ada Colau, que ya había hecho sus pinitos en el teatro pero sin suerte, utilizó la Plataforma de Afectados por las Hipotecas (PAH) para medrar en política, pero no lo hizo gratis, como la gente puede suponer, sino cobrando un sueldo, como coordinadora del proyecto de la oenegé Observatori de Drets Econòmics Socials i Culturals(DESC), cuando era portavoz de la PAH. El salario era de 1.973 euros mensuales, que pagaba el Ayuntamiento de Barcelona en la etapa de Xavier Trias como alcalde.
El exregidor pagó el alquiler para fingir paz social durante los meses previos a las elecciones municipales de mayo del 2015.