Lula da Silva renuncia a presentarse a las presidenciales de Brasil

El ex presidente izquierdista de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, encarcelado por corrupción, ha renunciado a continuar su batalla para presentarse nuevamente a las elecciones de octubre desde su celda, nombrando al ex alcalde de São Paulo Fernando Haddad como su sustituto en la campaña, dijo el martes una persona familiarizada con la decisión.

Haddad es más conocido por la construcción de carriles para bicicletas durante su único mandato como alcalde de la ciudad más grande de Brasil que por el carisma y la conexión con los pobres que le facilitaría el camino para ganar una quinta elección presidencial consecutiva para el Partido de los Trabajadores (PT).

La decisión, aunque ampliamente esperada, es el último giro en una carrera presidencial que las encuestas muestran que está liderada en este momento por Jair Bolsonaro, un candidato de extrema derecha que la semana pasada sufrió heridas graves cuando fue apuñalado en un mitin de campaña y aún se encuentra en el hospital en recuperación.

Haddad se une a la carrera por la presidencia en quinto lugar entre los 13 candidatos que compiten en las elecciones del 7 de octubre, según una encuesta publicada el martes pasado por la empresa encuestadora Datafolha.

Si ningún candidato gana más de la mitad de los votos en la primera vuelta, se llevará a cabo una segunda vuelta de votación entre los dos primeros clasificados el 28 de octubre.

El ex alcalde, un abogado de 55 años de edad, que estudió en la prestigiosa Universidad de São Paulo, es en cierto modo lo opuesto a Lula da Silva, de 72 años, un metalúrgico de voz ronca y sin educación que vino de una familia pobre y llegó a ser presidente de su sindicato y luego, en 2002, de su país.

Sin embargo, Haddad ha dicho que gobernará de la misma manera que el Da Silva, quien fundó el PT, gobernó Brasil hasta 2010 y dejó el cargo con la mayor popularidad de todos los presidentes de la historia del país.

"Lula fue un gran conciliador que siempre negoció con todas las clases sociales, desde los recolectores de basura hasta los banqueros", dijo Haddad en una entrevista reciente con Globo News. "Siempre tenía la puerta abierta para todos los brasileños, y así es como pretendemos gobernar el país".

Como Da Silva, Haddad tiene problemas legales. A principios de este mes, el ex alcalde fue acusado por los fiscales de aceptar dinero ilegalmente para pagar las deudas de la campaña. Un juez está examinando los cargos y tendría que aceptarlos para que Haddad sea juzgado.