"Salvar al soldado Assange": la operación rusa para rescatar al fundador de Wikileaks

En Nochebuena y sacándolo dentro de un vehículo diplomático. Según publica el periódico inglés 'The Guardian', un grupo de diplomáticos rusos planificó una operación secreta para "rescatar" al fundador de Wikileaks. Finalmente, la operación fue abortada pocos días antes por su elevado riesgo.

Assange, que lleva desde el año 2012 residiendo en la Embajada de Ecuador, cuenta con simpatías en Rusia, que ve al periodista como un elemento perturbador para los intereses de los Estados Unidos.

De ahí que altos dignatarios rusos planeasen su escapada con destino, con toda seguridad, a Moscú. La posibilidad de que Assange viajase en barco hasta Ecuador también fue contemplada.

Una pieza clave de esta trama es Fidel Narváez, un empleado de la embajada que habría servido de enlace con el Kremlin. Aunque Narváez ha negado cualquier vinculación con la operación en una entrevista concedida al 'The Guardian', el funcionario ya se vio envuelto en la huida de Edward Snowden hacia Hong Kong gracias a un salvoconducto que él mismo le facilitó.

Julian Assange vive en la embajada de Ecuador en el centro de Londres desde junio de 2012. Buscado por las autoridades estadounidenses por la revelación de secretos de estado a través del sitio Wikileaks, el activista australiano fue objeto de una orden de captura de la justicia sueca, debido a dos quejas de infracción.

A pesar de que estos procesos han sido archivados, el riesgo de ser detenido por la policía inglesa y entregado a los estadounidenses lo hace continuar enclaustrado en el pequeño edificio del país de Centroamérica.

VÍNCULOS DE WIKILEAKS Y RUSIA

El caso vuelve a alimentar las sospechas de las conexiones cercanas entre el mentor de Wikileaks y el Kremlin. Assange niega haber recibido informaciones de Moscú, pero el procurador especial Robert Mueller, que conduce la investigación a la influencia rusa en las elecciones estadounidenses, presentó una queja contra varios agentes secretos rusos, sospechosos de haber hecho llegar a Wikileaks los secretos que el sitio reveló sobre la campaña presidencial de Hillary Clinton contra Donald Trump.