Repasando los eventos, me pregunto quién marca la agenda política, la agenda económica o la social. Siempre he pensado que los partidos políticos deberían ser sobre todo organizaciones de paticipación ciudadana, con la voluntad de analizar y responder a los interrogantes de cada momento.
Desde una visión de la política como representación de los intereses ciudadanos, pero no sólo, también como acción transformadora y proyección de un modelo determinado de sociedad. Una especie de contrato con la ciudadanía y por ello con voluntad de gobernar. Pero ahora mismo veo que la tiranía del corto plazo no permite la mirada de gran angular tan necesaria para proyectar un futuro esperanzador y colectivo desde el que gestionar las decisiones del presente. Me pregunto si los programas electorales, como el pliego de cláusulas del contrato con la ciudadanía, tienen vigencia.
Y lo digo, porque la agenda económica, y por tanto con consecuencias sociales, se decide desde la Europa alemana, también fruto de los excesos de los tiempos anteriores que nos ha llevado a la situación actual, seamos sinceros. Y lo digo también porque en Cataluña tengo la impresión de que quien marca la agenda política del Gobierno son los movimientos ciudadanos con el llamado " proceso", sobre un Presidente atrapado entre sus propias interpretaciones desde la Diada del 2011.
Me pregunto si los actuales Gobiernos, catalán y español, tienen hoja de ruta o no a medio y largo plazo pensando en el conjunto, o improvisan en función de los movimientos que se producen, o del poder por el poder envueltos por paraguas. Veo más tacticismos que estrategias, más eufemismos que sinceridades. Mientras sigo pensando que la gestión de las crisis actuales - sí, crisis en plural - desbordan y al mismo tiempo se utiliza para implantar un modelo social que nos hace retroceder en derechos y cohesión. No estoy de acuerdo en absoluto que la crisis se acabe ni que lo peor haya pasado, porque lo que se está construyendo es una sociedad a dos velocidades. Y si vienen inversores extranjeros, es como cuervos en busca de gangas. Sí veo una especie de trazado en el Gobierno del PP , a golpes de decretos o de leyes impuestas desde la mayoría absoluta, como la LOMCE o la Reforma Laboral que responde clarísimamente a un modelo de sociedad y que aprovecho para denunciar porque nos hace más pobres y vulnerables mientras el poder queda en manos de otros intereses que no son los colectivos. Y en cuanto al Gobierno catalán lo veo muy gris, triste y atrapado, sinceramente. Atrapado en cómo gestionar el día a día del " proceso" y sin respuestas a la crisis económica y social sobre la que no hay tapa que valga.
Las últimas encuestas publicadas muestran una atomización de parlamentos de difícil gobernabilidad. Las encuestas sólo son tendencias, y con la rapidez de los hechos, lo que sirve para hoy, vete a saber si para mañana. Atomización y pérdida de centralidad de los "partidos de gobierno " tal y como los conocemos hasta ahora.
Y con todo, son las iniciativas ciudadanas las que intentan resolver los problemas diarios. Resilencia, que se dice ahora. Todo ello, para reflexionar un buen rato ...
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