PACIENCIA O RESILIENCIA

Estos días todo el mundo coincide en señalar la importancia trascendental y las dificultades del nuevo curso que empieza . Y ciertamente que es así. Yo diría que empezamos el curso con la fatiga de esperar, una vez más, algo nuevo que no llega . Fatiga y gris que veo en la calle, fatiga y gris que veo en las fuerzas políticas inmersas en la confusión de estos tiempos convulsos. Veo más titulares que debate, más tacticismos que proyectos. Desorientación en general a la hora de articular relatos y respuestas a la complejidad.

Con siete años de crisis en las espaldas y sin perspectivas realmente esperanzadoras, nos pide aún más paciencia. La paciencia, esta capacidad de tolerar y soportar una situación serenamente. Pero es un concepto pasivo, pretendidamente pasivo como mínimo en esta situación en la que el concepto es sinónimo de asumi , desde la resigació, los sacrificios como única salida . Pero sacrificios de unos, de las clases trabajadoras y medias. Y la pregunta inmediata es, ¿para qué?. No se puede pedir paciencia sin compromiso por parte de los que gobiernan. No se puede exigir sacrificios sin transmitir confianza , totalmente perdida ante la opacidad, la falta de sinceridad y de respuestas creíbles.

Creo que algunas fuerzas políticas también han optado por la paciencia. Esperar surfeando a que el temporal amaine. Y creo también que no es una buena señal , porque la finalidad de una opción política es transmitir un ideario con el que se identifique y anime una gran mayoría de la ciudadanía . Y porque no sé si esparcirá el temporal, o como mínimo , nada será igual. Hay que pensar en un nuevo tiempo que ya está presente. Me dirán que en Cataluña sí tenemos uno, de proyecto , el del derecho a decidir o el independentismo. Pero pensemos por un momento que quizá en buena medida crece por la falta de otros trazados.

En momentos como los actuales siempre se reinventan palabras , aunque a menudo temo que no lleguen a conceptos . Resiliencia, una nueva palabra que sale de vez en cuando. Quizás es un poco más activa que la paciencia. La capacidad de sobreponerse a periodos de dificultad y me parece que utilizado en la psicología emocional se refiere a hacer camino para salir más fortalecido.

En cualquier caso, diría que son tiempos de prescindir de la paciencia, en el sentido pasivo del término, y buscar itinerarios más creativos . Hay movimientos, pequeñas empresas, gente en red, y plataformas ciudadanas que ya lo están haciendo . Contra la resignación , innovación social . Nuevas formas de hacer política , y algunas experiencias que habrá que ver el impacto que tendrán en nuevos escenarios políticos y cómo pueden influir en los programas y maneras de hacer de los partidos . Si los partidos no cambian , quizá sí lo hacen estas nuevas formas de incidir, articular, conectar.... Todo cambia.

Consol Prados