Albares defiende la liberación inmediata de los españoles retenidos por Israel: "No se les debe acusar de nada"
Exteriores convoca a la encargada de negocios de Israel para trasladar su protesta y no descarta más medidas a futuro
El ministro de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, José Manuel Albares, ha defendido este jueves que los españoles que viajaban a bordo de la Global Sumud Flotilla y que han sido "retenidos" por Israel tras la intercepción de sus barcos deberían ser liberados inmediatamente y no se les debería acusar de nada ya que no representaban ninguna amenaza.
En declaraciones a 'La Hora de la 1', recogidas por Europa Press, el ministro ha informado de que, además de los contactos que ya ha habido en las últimas horas con el Ministerio de Exteriores israelí, también se ha convocado a la encargada de negocios israelí en España, Dana Erlich, para trasladar el rechazo del Gobierno por lo ocurrido y reclamar su liberación.
Según ha explicado el ministro, por el momento no disponen de datos concretos sobre el número de españoles que ya han sido interceptados --a bordo viajan 65 españoles-- pero sí tienen constancia de que un primer grupo ya ha llegado a puerto, hacia donde se dirige el cónsul y el encargado de Interior de la Embajada, junto con otro guardia civil, para poder prestarles atención consular.
Albares ha insistido en que los miembros de la flotilla "no representaban ninguna amenaza ni tenían ningún ánimo de hostigamiento, de realizar cualquier tipo de acción ilegal y por lo tanto entiendo que no se les debe de acusar absolutamente de nada" ya que se trata de "ciudadanos españoles pacíficos y solidarios".
En este sentido, ha recalcado que su prioridad ahora es que puedan recuperar la libertad de movimientos que no deberían haber perdido "lo antes posible", ya que ejercían su derecho de paso inocente en aguas internacionales, y puedan regresar a España "inmediatamente". "No voy a aceptar ninguna acusación injusta e infudada hacia ellos", ha recalcado.
MÁS ACCIONES EN EL FUTURO
En estos momentos, ha dicho el ministro, está centrado en poder brindarles atención consular y protección diplomática y "en que su integridad física y sus derechos sean respetados", si bien ha dejado la puerta abierta a adoptar otras medidas más adelante.
Según ha indicado, el Gobierno está "analizando exactamente qué está ocurriendo, porque todavía los hechos no han terminado, y llegará otro momento en el que una vez que analicemos todo lo que esté ocurriendo pues podamos tomar otro tipo de decisiones". "En mi trabajo como ministro de Asuntos Exteriores no soy amigo de la inacción, tampoco soy amigo de la precipitación", ha puntualizado.
Escribe tu comentario