“Dios los cría y ellos solitos se juntan”, es un refrán popular que suelen utilizar las personas. No hace falta que explique el significado porque de todos es conocido. Pero, yo añadiría: “Dios los cría y los intereses los juntan”. Todo esto viene a cuento por esa conocida comida que organizó la “reinona”, Pilar Rahola, en la que el nuevo “rey” Carles Puigdemont era agasajado por la periodista de cabecera de Artur Mas. “A rey muerto, rey puesto” debió pensar la de Badalona y, con una corte más bien pobre, la reinona intentó agasajar al que ahora ostenta el poder en la Generalitat, ¿si?

Eso creen algunos. El nuevo rey de la dinastía idumea (o herodiana) necesita que la reinona de Cadaqués le haga de introductora en la sociedad del verdadero poder de Catalunya. ¿Los comensales asistentes representan a estos poderes? Rotundamente no. Flaco favor le ha hecho la tertuliana ilustre al nuevo rey Puigdemont. Solo hay que ver la imagen del peor presidente que ha tenido el FCB pero que más rentabilidad profesional y personal le ha sacado a su cargo. Siempre con una copa de cava en la mano y no precisamente para ofrecerla, sino para empinar el codo, que lo hace muy bien; ponerse al lado de alguna mujer que esté bien, en este caso al lado de Helena García Melero, la periodista independiente de TV3, y ponerle el brazo por encima del hombro, según las imágenes ofrecidas en el video colgado por la anfitriona y susurrarle al oído alguna de sus paridas, que suelen ser muchas. A Puigdemont le encanta Laporta, con quien tienen una relación que le viene de antes de su actual cargo. No es la primera, ni la segunda vez que están juntos, hasta realizaron un viaje a Rumania, la tierra natal de su esposa, y se lo pasaron de lo lindo, solo hay que mirar las fotos.

Por si alguien se desmadraba en esa comida, allí estaba el comisario jefe de Mossos d’Esquadra, Josep Lluís Trapero, todo un ejemplo de imparcialidad… Pero como en cualquier corte que se preste: Los que no son cortesanos, son villanos. "Palabra dada, palabra sagrada. La palabra de cortesano, humo vano".

La noticia del verano, no es la investidura o no de Rajoy y el 'no' del PSOE a la misma, ni la moción de confianza a Puigdemont, sino la comida organizada por la reinona Rahola al nuevo rey Puigdemont, y la poca capacidad de convocatoria de la anfitriona, que va perdiendo algo más que su independencia informativa.